sábado, 3 de marzo de 2012

4.1. Entrevista a Benito Cabedo Garcia

Me llamo Benito Cabedo Garcia. Nací en Villahermosa del río el día 30 de enero de 1930. Debido a la escasez de recursos que sufríamos en mi familia, nunca tuve la oportunidad de ir a la escuela. Actualmente, a mis ochenta y un años, como estoy jubilado me dedico a trabajar mis tierras, en las que cultivo almendros, naranjos, etc.
 Viví una infancia muy dura, sobretodo por la escasez de alimentos que sufrimos todos en aquellos tiempos. Pero aún así, recuerdo mi infancia con nostalgia y no podría decir que fui infeliz en aquel tiempo.
 En mi familia éramos ocho hermanos, y siempre nos llevábamos bien entre nosotros. 
Nuestros padres eran muy estrictos con nosotros, pero siempre mantuvimos una buena relación, aunque nunca nos dieran mucho cariño.
 En aquellos difíciles tiempos no se le daba mucha importancia a los estudios, por no decir ninguna. 
Teníamos que empezar a trabajar lo más pronto posible para poder llevar algo de dinero a casa.
 Yo empecé a trabajar a los siete años como pastor de un rebaño de ovejas.
 No tenia apenas tiempo libre, pero los domingos por la mañana íbamos algunos hermanos andando hasta la plaza del pueblo, y allí siempre encontrábamos amigos. 
 Mi primer juguete, y uno de los pocos que tuve, fue una pelota hecha de trapos, que compartía con mis hermanos.
También jugábamos al escondite, a las cartas, etc.
 Respecto a la comida, mi madre hacía el pan cuando había trigo. También comíamos huevos de nuestras gallinas y, en diciembre, en la matanza, comíamos carne de cerdo. E incluso, durante el año podíamos comer alguna oveja.
 Teníamos muy poca ropa. Todos los hermanos vestíamos las prendas hechas de retales que nos fabricaba nuestra madre.
Entre los hermanos, éramos siete chicos y una sola chica, la más pequeña. Ella se ocupaba de ayudar a nuestra madre con las tareas domésticas, mientras que nosotros salíamos a trabajar fuera para traer dinero a casa.



   
Ermita del Bartolo, en Villahermosa del Río. 
Años 30.











Hecho por Valeria.

No hay comentarios:

Publicar un comentario